Páginas

    Fantasmas Del Ático

    viernes, 2 de noviembre de 2012

     
     
    Es simple.
    Por qué.
    Por qué cuando te miro a los ojos me quedo sin respiración. Por qué cuando me tocas me siento como en casa. Por qué una sonrisa tuya apaga mis problemas. Por qué sueño contigo hasta cuando por las noches estas a mi lado. Por qué eres capaz de hacer de cada día, uno especial. Por qué me comprendes aunque sea puro desorden emocional. Por qué me escuchas cuando sabes que no quiero tu opinión. Por qué me dedicas cada día de tu vida sin pedir nada a cambio.
    Por qué… por qué… Esa es la gracia ¿no? Que no hay ningún por qué a nada de lo anterior. Solo hay una cosa. Sentimientos. Y aunque suene ñoño, irreal, inseguro, vacilante y estúpido, no cambiaría ninguno de ellos.
    Si algún día se rompen, ya se comprará pegamento.
     
     

    2 comentarios:

    1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

      ResponderEliminar
      Respuestas
      1. Que bonito volver a recordar sentimientos como esos, soy nueva por aquí y la verdad ando un poco perdida, he dado con tu blog y me ha gustado bastante, así que te sigo y te seguiré leyendo! Y si tienes tiempo y ganas que es fundamental, pásate por mi realidad, eres bienvenida :)

        Eliminar

    Chat gratis